Pimán es un oasis de vida dentro de una bien conservada mansión y capilla, con elegantes salas de estar y villas de diseño individual, jardines privados, piscina al aire libre y un exclusivo spa. La casa principal ofrece 7 habitaciones restauradas y remodeladas, que conservan el estilo y la construcción tradicional. Cada detalle ha sido cuidadosamente pensado desde la cromática, en tonos claros y neutros, hasta los elementos de decoración que evocan a un estilo rústico francés. Este hotel boutique es un lugar perfecto para descansar y, desde los jardines o frente a la chimenea, sumergirse en una obra literaria. Además, a poco tiempo se puede visitar el valle fluvial del Chota –que tiene una exuberante agricultura de tunas, mangos, tomates y caña de azúcar– o el Museo Honka Monka para conocer la intrigante historia y cultura de esta población afro ecuatoriana.